La Neuroarquitectura ha demostrado que los entornos arquitectónicos influyen en determinados procesos cerebrales que tienen que ver con el estrés, la emoción y la memoria, favoreciendo la producción de oxitocina y serotonina, que son secreciones relacionadas con las sensaciones placenteras, la relajación y la felicidad. Al igual que una determinada especie vegetal o animal vive en un determinado entorno natural, según sus necesidades biológicas, el ser humano necesita para su existencia un entorno que debería ser lo más natural posible para preservar su Salud, he aquí la razón e importancia de que nuestros entornos sean Saludables. 

Hoy en día, en los países industrializados, el ser humano pasa más del 90% de su existencia dentro de espacios cerrados, por lo cual es de primordial importancia tener en cuenta las características de nuestros espacios. Desde 1950 se han producido cambios sustanciales en las construcciones y en los ambientes donde vivimos, sin tener en cuenta los diversos efectos que tiene sobre nuestra Salud. Los seres humanos NO HEMOS PODIDO ADAPTARNOS A LOS CAMBIOS ACELERADOS que han sufrido los ambientes en que vivimos, y como consecuencia nuestro sistema biológico se ve afectado, provocando cada vez más ENFERMEDADES AMBIENTALES Y DOMESTICAS. Y lamentablemente, la Salud está sufriendo las consecuencias de estos ambientes cada vez más “desnaturalizados”.

La neuroarquitectura ha demostrado que el diseño y la iluminación de los centros hospitalarios influyen en la curación de los pacientes, y también ha demostrado que influyen en la salud y la productividad de los ambientes de trabajo, oficinas, espacios educativos, y de todos los ambientes donde se realicen actividades. 

 Creemos  que la Salud es lo más importante, y al igual que debemos llevar una vida con hábitos y con una alimentación saludable, es necesario vivir en Ambientes Saludables.  

¿Por qué la Luz es importante? La LUZ es Medicina preventiva y Curativa. La Luz es la energía que da Vida y Salud a nuestros ambientes. Por ello, al pensar en un ambiente Saludable, la energía, es decir la luz que lo envuelve, debe ser Saludable. De aquí la importancia de la calidad de la LUZ en los ambientes  donde transcurre nuestra vida. 

La luz es energía «invisible» cuando está presente, muchas veces no somos conscientes de su presencia, pero cuando no está, si la echamos en falta. A veces la echamos en falta conscientemente y a veces inconscientemente: sentimos que algo falta, pero no sabemos lo que es. Suele pasar que existen espacios que nos atraen más y otros que nos atraen menos, la razón es la «luz», es decir la energía que posee ese lugar. Y simplemente modificando la luz: la energía, cambia nuestra sensación hacia ese lugar, de aquí su importancia.

El hombre es un ser de vida diurna, pero se ha transformado en seres de vida nocturna, lo que ha provocado dormir un número menor de horas por día y que no sea un sueño reparador. Esto provoca la alteración de los ciclos circadianos y debilita nuestro sistema inmunológico, hecho que debilita nuestra Salud. Es así que se concluye que la Luz es MEDICINA CURATIVA al ser la responsable de «poner en hora» los ciclos circadianos, lo que facilita el curado del organismo. Y es PREVENTIVA dado que al evitar la alteración de los ritmos circadianos, el organismo funciona correctamente y es más resistente ante posibles afectaciones hacia la Salud.